Organizaciones como Global Witness, Enough Project, o Partnership África-Canadá muestran su “seria preocupación” por los movimientos que se están efectuando en Washington para dejar sin efecto el artículo 1502 de la ley Dodd Frank, que obliga a los importadores de Zinc, Tántalo, Tungsteno y Oro a justificar el origen de estos metales para asegurar que no proceden de países en conflicto.
Este malestar parte de unas controvertidas declaraciones del presidente de la SEC (El equivalente norteamericano a la Comisión Nacional del Mercado de Valores española), en las que ponía en duda su compromiso de hacer cumplir con los requisitos de información esenciales en cuanto a los metales de conflicto, que regula la sección 1502 de la Ley Dodd-Frank. La falta de una respuesta contundente por parte del Gobierno de EE.UU ha sido la que ha puesto en alerta a las ONG que ‘vigilan’ por el cumplimiento de la norma.
Esta ley entró en vigor en 2010 bajo el Gobierno de Obama y obligaba especialmente a las compañías que cotizan en la Bolsa de valores. Si Estados Unidos se retirase ahora, “no sólo va a poner en peligro la voluntad política, sino que se enviará la señal a los señores de la guerra y contrabandistas de que el mundo es indiferente a las prácticas de corrupción, explotación y abuso«, avisan desde las ONG.
Para una información más amplia sobre el tema, pueden acceder a los diferentes comunicados emitidos por las Organizaciones No Gubernamentales que han denunciado estos nuevos planteamientos de la administración Trump:
Puede leer el original en: http://www.goldandtime.org