Fue un regalo del rey Felipe V a su segunda esposa en 1714
El primer registro en la historia de este diamante en talla pera y color azul profundo comienza en 1714 tras ser entregado como regalo de bodas por el rey Felipe V a su segunda esposa, la italiana Isabel de Farnesio. La consorte reinó en España hasta 1746 y a su muerte la gema pasó a manos de su hijo Felipe, duque de Parma.
Originario de las míticas minas de Golconda, en la India, el diamante fue sucesivamente pasando a manos de los descendientes de Farnesio. Y aunque el ducado de Parma desapareció físicamente tras la reunificación italiana de 1860, el actual representante de la casa es Carlos Javier Borbón-Parma (pretendiente carlista al trono de España), aunque Sotheby’s no ha confirmado que el diamante sea de su propiedad.
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