25.Jun.2017

Desde hace años el reloj se ha convertido en algo más que un simple elemento para saber la hora.
Hoy en día, cada joya relojera es una obra de arte totalmente única que ayuda a complementar nuestro estilismo, siendo en ocasiones la pieza principal del  mismo.

 

Todos recordamos el clásico reloj de Brad Pitt en la película Ocean’s Eleven que lo convirtió en un mito o, los ostentosos relojes de las estrellas de Rock de Estados Unidos. Sin duda alguna, el reloj es una obra de arte.

A pesar de que Truman Capote era un apasionado de la marca Cartier, el artista que pasará a la historia por su idilio con el reloj es Andy Warhol. Quién decía que él no llevaba reloj para saber la hora, sino porque había que llevarlo. Pero han habido mucho más famosos que han sido aficionados a la marca: Madonna, George Clooney, Grace Kelly o Michelle Obama.

Así pues, los relojes Cartier siempre han estado relacionados con el mundo del glamour y las celebrities, por lo que no es de extrañar que en pleno siglo XXI encontremos estas obras de arte en un museo. Y es que, desde hace poco tiempo, puedes encontrar una exposición de los relojes Cartier en el Design Museum de Londres. Un atractivo turístico para forasteros y lugareños.

En esta exposición podemos ver la relación entre Cartier y los grandes momentos del Siglo XX: Cartier y Gustave Eiffel o Alberto Santos-Dumont. Tanto es así que encontramos una réplica del avión que utilizaba Santos-Dumont para viajar o una Torre Eiffel de bronce que simboliza la relación entre Cartier y su creador.

El encargado de llevar a cabo tan arriesgado proyecto no fue otro que Norman Foster, al que contactaron desde la casa Cartier para que fuera la cara visible del proyecto. En cuanto a los modelos que podremos encontrar en esta exposición, son los más conocidos y puros de la marca: el Panthère, el Crash, el Tank o el Tonneau por ejemplo.

Cartier ha sido capaz de convertir sus relojes en auténticas piezas de museo, gracias a su meticuloso proceso de fabricación, son piezas únicas. Es posible que el éxito de Cartier radique en su elegancia, precisión milimétrica y sonidos armónicos de sus agujas. Pero indudablemente es un símbolo de elegancia e historia. El museo Desing Museum de Londres, nos brinda la oportunidad de ver la evolución de una de las marcas icónicas de este siglo.

Fuente: blog.garciajoyeros