Sólo las personas espirituales o de mente despejada deberían usar peridoto. Las personas con muchos problemas terrenales no serán capaces de entender la belleza del peridoto. Los muy espirituales pueden usar peridoto en un collar con la piedra hacia la garganta para sentir su efecto tranquilizador. Si se lleva en un collar, el peridoto es un protector contra las emociones negativas. El peridoto ha sido conocido por tener efectos curativos en la vesícula biliar y el hígado.

La leyenda cuenta que el peridoto fue una de las piedras favoritas de Cleopatra y que algunas de las “esmeraldas” que ella usó eran en realidad peridoto. Cleopatra es tan famosa por su amor a las esmeraldas como lo fue Lady Di por su amor a los zafiros. El peridoto, un olivino cristalino, fue minado por milenios en la isla de Zabargad, 35 millas fuera de la costa de Egipto en el Mar Rojo. Supuestamente era más bella que la esmeralda que los egipcios también producían, de hecho tan bella, que se cree que fue la segunda piedra usada en el peto de alta plegaria por el segundo templo de Jerusalem construido en 515 DC.

Los griegos y los romanos continuaron el interés por el peridoto. Los romanos la llamaban la “esmeralda nocturna” porque su verdor no se oscurecía por la noche sino que permanecía brillante bajo cualquier condición lumínica.

Curiosamente, para una gema con tanta historia como el peridoto, su nombre es reciente. Por siglos, esta gema fue conocida como Crisolita de la palabra griega que significa “piedra amarilla”. Para evitar la confusión constante con el topacio amarillo, los británicos adoptaron el nombre de peridoto en el siglo 18.

Es conocida desde épocas antiguas. Lo puedes notar en algunos accesorios que lo prueban. Incluso en tiempos antiguos la gente entendía y disfrutaba la belleza de esta piedra. Lo puedes ver en estas piezas, que son tan elegantes y hermosas.

Los joyeros pueden crear cosas absolutamente asombrosas con esta piedra tan adorable.