Los diamantes sintéticos están empezando a entrar en el comercio de joyería. Mientras que rubí, zafiro y esmeralda cuentan ya con sus análogos sintéticos desde hace muchas décadas, el diamante ha tardado más en ser obtenido en el laboratorio en calidad, tamaño y precio adecuados para su uso en joyería. Pero han llegado para quedarse. Las fuentes de carbono en la naturaleza son inagotables y solo hace falta algo de energía para unir sus átomos de forma apropiada y pasar de un abundante grafito a tan valorado diamante. Actualmente, los precios de diamantes sintéticos ya están muy por debajo de los naturales, aunque todavía tienen valor superior a las imitaciones, como la zirconita o la moissanita. No obstante, los métodos tecnológicos se mejoran y se abaratan continuamente y podemos estar seguros que el precio de diamantes sintéticos irá bajando progresivamente.
Muchos profesionales de joyería reciben ofertas de venta de diamantes sintéticos directamente de los fabricantes asiáticos. También están disponibles para compra directa en muchas webs y plataformas de comercio online, tanto para profesionales, como para particulares. Una marca tan importante como Swarovski anunció hace meses una línea nueva de joyería con diamantes sintéticos. En el Laboratorio del IGE, desde octubre de 2016 se han analizado tres casos de diamantes sintéticos, desde un solitario con un brillante de casi tres quilates hasta un lote de cien quilates de diamantes pequeños (1,3-2,0 mm), todos ellos con intención de venta como naturales. Estos datos deberían ser suficientes para contestar a la pregunta de si ya han llegado al mercado.
Para leer e artículo completo ir al original: http://www.ige.org/noticias/identificacion-diamantes-sinteticos-mediante-metodos-gemologicos-basicos/